¡¡Ya estamos otra vez, que si me toca que si no me toca el Gordo de Navidad…!! En fin, al final lo único que nos queda a los que seguimos siendo pobres es… ¡reírnos de todo!… snif… snif… y rogar para que nos toque la del Niño.
¡¡Ya estamos otra vez, que si me toca que si no me toca el Gordo de Navidad…!! En fin, al final lo único que nos queda a los que seguimos siendo pobres es… ¡reírnos de todo!… snif… snif… y rogar para que nos toque la del Niño.